Recomendaciones específicas para visitas en espacios museísticos y salas de exposiciones
Utilizar tecnología en línea para minimizar o eliminar gestiones que no garanticen el distanciamiento interpersonal. Con estas tecnologías se facilita la regulación de aglomeraciones en colas y el control de aforo.
Instalar barreras físicas de protección para el personal en accesos y lugares de control, información y atención al público.
Colocar en los accesos carteles informativos con normas y recomendaciones específicas para el público y señalizar la distancia de seguridad.
Favorecer el acceso o descarga previa de la información o material didáctico a través de los dispositivos móviles de los visitantes. En su defecto puede usarse señalética y gráfica convencional.
Mantener abiertas las puertas que no tengan automatismos o funciones específicas de seguridad.
Limitar el uso y reforzar la desinfección de ascensores y otros sistemas de comunicación vertical con cabinas cerradas.
Restringir el acceso a espacios reducidos o zonas con accesos angostos o escaleras de doble sentido. Estos espacios no computarán para establecer el aforo máximo.
Delimitar la distancia entre visitantes y bienes con marcas en el suelo, tarimas o catenarias. Estas serán preferiblemente plásticas o metálicas para facilitar su desinfección.
Marcar, cuando sea posible, el itinerario en el interior y el exterior. De forma que se establezca una entrada y una salida para evitar cruces, sin menoscabo de los recorridos de evacuación de incendios.
Eliminar bancos. Para personas que precisen descanso, pueden sustituirse por sillas plegables individuales que serán desinfectadas después de cada uso.
En salas con recursos u obras audiovisuales es necesario controlar el aforo y desinfectar sillas o bancos después de cada uso.
Colocar alfombras desinfectantes a la entrada de los centros.
Utilizar dispositivos con bolsa y filtros HEPA para el aspirado de espacios y/o bienes con garantía de un alto grado de filtrado.
Favorecer la ventilación de los espacios desinfectados para evitar la acumulación de compuestos orgánicos volátiles.
Revisar y cambiar en el periodo recomendado los elementos de filtrado en los sistemas de climatización.