TECNOLOGÍAS SIN CONTACTO APLICADAS A VISITAS A MUSEOS Y CENTROS DE ARTE / CÓDIGOS QR

Los códigos QR Quick Response code fueron creados en 1994 por la compañía japonesa Denso Wave. Son imágenes que contienen información codificada que pueden ser impresas.

REQUISITOS PARA  LOS VISITANTES

El visitante debe disponer de un móvil y de conexión a internet.
El móvil debe tener lector de códigos QR nativo o sino podrá leerlo a través de una App. Los móviles recientes tienen lector integrado en la cámara. En Android, por defecto se usa la App Google Lens.
El visitante con el móvil enfoca y escanea el código accediendo a los contenidos que se desea comunicar. 

FUNCIONAMIENTO

Existen diversas formas de utilizar los códigos QR, fundamentalmente: independiente o a través de plataformas de servicios.

Independiente: Se crea el contenido en una URL y mediante alguna de las múltiples herramientas gratuitas en línea se producen los códigos.
También, mediante servicios gratuitos, la organización puede hacer un seguimiento básico de su uso o puede añadirse la dirección a una cuenta de Analytics para obtener un seguimiento más completo.

Plataformas: Debido a la popularidad que están alcanzando estas tecnologías en el campo del marketing, existen diferentes plataformas que ofrecen servicios de creación y gestión de códigos QR. Ofrecen muchas ventajas de personalización, de análisis de uso y de gestión de contenido, como la creación de códigos dinámicos que permiten cambiar el contenido sin tener que cambiar la imagen de un código ya creado. Dependiendo de los servicios y la integración el precio es variable y puede pagarse por su uso mensual o anual.

Las impresiones de los códigos se encargaría a terceros, y no tienen requisitos específicos salvo un tamaño mínimo recomendado de 3 x 3 cm para escanearlos correctamente.

APLICACIONES

Existen casos de uso de códigos QR en Museos al menos desde 2009. La utilización más generalizada es la de proporcionar información adicional a los visitantes como biográfica del artista, imágenes del resto de su producción, información adicional a la cartela, contenido generado por los propios visitantes, etc.

Pueden usarse diferentes colores de QR para identificar información adaptada al visitante, idioma o edad.

Otra aplicación es añadir interactividad como en la propuesta del Smithsonian Museum accediendo a la App MEanderthal.

También puede usarse para conectar mejor con el público, animando a compartir en redes sociales la experiencia del visitante, a seguir las redes sociales de la institución o a involucrarse en alguna actividad.

Además de los usos comentados, los QR tienen aplicaciones muy prácticas relacionadas con el objetivo de este post como el acceso a audioguías, colocando un QR cerca de cada obra como en esta exposición del ING Art Center, Love. Hate. Debate.

Igualmente pueden facilitar la compra de entradas en línea para evitar contactos y tiempos de espera, o facilitar la conexión al WiFi de la institución, para ofrecer mayor accesibilidad al visitante.